Desde muy pequeña descubrí en mi corazón una profunda inclinación hacia el servicio, la sanación y el bienestar de los demás. Participaba activamente en eventos religiosos y comunitarios como la Pascua Juvenil y el Encuentro Juvenil, espacios donde pude experimentar la dicha de servir a los más necesitados. Desde entonces, entendí que sanar no era solo un acto médico, sino un acto de amor.
Cantaba en el coro del Colegio La Presentación, animando las eucaristías y conectando con esa fuerza espiritual que hoy sigue guiando cada uno de mis pasos.
Decidí estudiar Medicina, graduándome como Médico y Cirujano, y guiada por mi pasión por salvar vidas, me especialicé en Medicina de Emergencias en la Universidad CES de Medellín. Tuve la gran fortuna de trabajar en el Hospital Pablo Tobón Uribe, una institución a la que amo y a la que siempre le guardaré una profunda gratitud por todo lo que me permitió aprender y vivir.
Siempre inquieta por comprender más allá de lo evidente, realicé una Maestría en Administración de Negocios (MBA) en la Universidad EAFIT de Medellín, donde amplié mi visión de la vida y descubrí el inmenso valor del liderazgo consciente y la gestión humana desde el servicio.
Mi búsqueda espiritual se intensificó, y el destino me llevó a trabajar en Carnival Cruise Line, una de las líneas de cruceros más importantes del mundo, como Senior Physician. Allí, en un pequeño universo flotante con personas de más de 90 nacionalidades, perfeccioné no solo mi inglés, sino mi capacidad de adaptarme, entender y conectar con la diversidad humana en su máxima expresión.
Allí tuve además la bendición de conocer a un ser humano extraordinario, un italiano que más tarde se convirtió en mi esposo y compañero de vida, y juntos formamos una hermosa familia con Gabriella, nuestra amada hija. Una prueba más de que cuando sigues el llamado de tu alma, la vida te recompensa con regalos que superan cualquier expectativa.
Movida por mi deseo de ayudar a las personas no solo desde lo físico, sino también desde lo emocional y espiritual, viajé a Ámsterdam, donde me certifiqué como Coach de Vida, Coach Motivacional, de Inteligencia Emocional y en PNL (Programación Neurolingüística). Ese fue el punto de quiebre en mi vida: la puerta de entrada a un mundo fascinante de conocimiento interior y transformación.
Desde entonces, me he formado con los mentores más destacados del crecimiento personal, la sanación cuántica y la espiritualidad: